sábado, 3 de abril de 2010

Y es que estas ganas de irse, llegaron para quedarse y le prometen besos brujos a mi soledad. Nos debemos ese antojo de aprender a bailar tango. Si es que en otra vida nos volvemos a olfatear. Y tus manos no me escuchan, y mis labios no quieren ni verte. Un minuto antes de dejar de quererte. Y mi olvido no te olvida,  y mis miedos te desean suerte. Un minuto antes de dejar de quererte. Y siento que me llenan la cara de dedos, la penumbra del deseo y las ampollas de este adiós.  Y no puedo masticar, y tengo 50 mil de fiebre. Un minuto antes de dejar de quererte. Y me duele la ciudad y tengo tu nombre entre los dientes. Un minuto antes de dejar de quererte.



=(

No hay comentarios.: